Como una compañía creativa, nuestros tiempos pueden parecer distintos a los tiempos como opera tu compañía. Para que nuestros proyectos sean exitosos, nosotros priorizamos largos momentos de trabajo ininterrumpido.
Es por eso que abrazamos una política de comunicaciones que elimina de raíz la interrupción de los chats en tiempo real, de las reuniones, y de la comunicación sincrónica.
Pero no queremos disfrutar solos de nuestro espacio de comunicaciones, y queremos invitarte a estar informado del proyecto que estamos desarrollando, consulta con el encargado de proyecto el link a tu espacio.
También, si tienes un tiempo, y estas interesado en los ¿Porque?, puedes visitar nuestro blog, donde estamos constantemente hablando de trabajo y comunicación.
A continuación encontrarás una serie de principios generales que intentamos tener en cuenta a la hora de comunicarnos con todas las personas involucradas en el desarrollo del proyecto, pero sobretodo con el público. No son requisitos, pero sirven para crear límites y prácticas compartidas a las que recurrir cuando hacemos la única cosa que afecta a todo lo demás que hacemos: comunicar
No podemos no comunicarnos. Pocas cosas son tan importantes para estudiar, practicar y perfeccionarse como la comunicación clara. De acá concluimos que las empresas no tienen problemas de comunicación, tienen problemas de falta de comunicación.
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En tiempo real a veces, asíncrono la mayor parte del tiempo.
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Nuestra comunicación interna está basada en la escritura de larga duración, en reemplazo de una tradición verbal de reuniones, conversaciones de pasillo y chats. Nuestro objetivo:Reducir el número de reuniones, videoconferencias, llamadas u otras oportunidad en tiempo real para interrumpir y ser interrumpido.
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Las discusiones importantes y significativas deben tener el tiempo necesario para desarrollarse. Cuando nos apuramos a juzgar o exigir respuestas inmediatas sólo estamos aumentando la probabilidad de que se tomen malas decisiones.
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Las reuniones serán siempre el último recurso, no la primera opción.
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La escritura se solidifica, en cambio el chat: se disuelve. Las decisiones importantes empiezan y terminan con un intercambio de pensamientos y opiniones completos, no con peleas de una línea a la vez. Si es importante, crítico o fundamental, escríbelo, no lo chatees.
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Hablar sólo ayuda a quien está en escuchando, escribir ayuda a todos. Esto incluye a las personas que no pudieron hacerlo, o a cualquiera que se incorpore al proyecto en el futuro.
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Nunca esperes ni exijas que alguien se ponga en contacto contigo inmediatamente, a no ser que se trate de una verdadera emergencia. La expectativa de una respuesta inmediata es tóxica.
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Una mala comunicación genera más trabajo.
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La comunicación no debería requerir la sincronización de calendarios. Los calendarios no tienen nada que ver con la comunicación. Escribir, más que hablar o reunirse, es independiente de los horarios y mucho más directo.
«Ahora» suele ser el momento equivocado para decir lo que se te acaba de ocurrir. Es mejor dejar que se filtre por el tamiz del tiempo. Lo que queda es la parte que vale la pena decir.
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Si quieres una respuesta, tienes que hacer una pregunta. La gente suele tener mucho que decir, pero poco que ofrecer. Las preguntas automáticas en un horario regular ayudan a la gente a practicar el intercambio, la escritura y la comunicación.
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La urgencia está sobrevalorada, el «lo antes posible» (ASAP) es un veneno.
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Si algo va a ser difícil de escuchar o compartir, invita a hacer preguntas al final. Terminar sin la invitación a preguntar da lugar a un silencio en público, y a conjeturas privadas. Aquí es donde se reproducen los rumores.